Música Convulsiva, Sólo Adquirible Con (((Receta Retenida)))

Especímenes que vienen de un lugar extraño, comunicándose con palabras impronunciables. De apetito melódico, mentalizados por trascender su tan alocado mundo de imaginería plena.
Sin más, sin menos, son ellos. Prendan sus oídos y siéntense a escucharlos...
Akinetón Retard es un sexteto chileno que diluye el seminal líquido del Jazz en su cultivo más bizarro y la cepa del Rock de instinto clásico, con dosis inyectables de ritmos latinos.
Parido como el proyecto que aglutinó a varios jóvenes estudiantes de música, en 1994, Vicente García-Huidobro junto a su guitarra encabezó los primeros esbozos artísticos. Desde entonces, el paso al crear el característico dialecto que emplean, llamado "Akranánico" se fusionó a los pocos recordables seudónimos, que cada integrante posee.
Bolshek Tradib en batería, Estratos Akrias en saxo y clarinete, Tanderal Anfurness en guitarra, Petras das Petren en saxo, Lectra Celdrëj en bajo y Errap Quicky Celaznog en flauta traversa...
Pero no solamente por sus nombres tan singulares, esta cofradía de músicos destaca.
Porque desde su médula más insana, agrupaciones de las características de Akinetón Retard luchan por pisar despacito, impidiendo que los masivos tentáculos de la "industria" los ahoguen en el intento del crecer constante.
"Los europeos nos presentaban en sus anuncios con una serie de motes sorprendentes: Latino Jazz Underground, Orchestraler Jazz o Urban Strong Jazz", recuerda García-Huidobro, de sus actuaciones por el viejo continente. O en una de esas, el que hace la precisión es Tanderal Anfurness como es conocido su alter ego creativo, en el farmacológico y parlante universo de la banda.
"Creo que Akinetón es un grupo dado al humor. En general, no somos tipos muy serios. Es decir, tenemos cosas serias y hemos trabajado muy arduamente por períodos largos. Por eso, pienso que si uno hace música seria tiene una propuesta solemne y, al mismo tiempo, es un tonto grave... Lo irónico es que después de tocar una cuestión súper densa y unas onomatopeyas muy crudas, puedes reírte de ti mismo, matarte de la risa en el escenario y hacer o decir alguna cosa divertida", concluye el guitarresco interprete.

(((Edgar Allan Poe sigue respirando)))

El aura de la insistente fatalidad y el abismo que golpea la puerta de sus personajes, estuvieron siempre instaurados en el lúgubre sentir del literato estadounidense, Edgar Allan Poe. (1809-1849).
Además de abrir la cortina estilística de la novela policiaca, el horror corrosivo destiló por goterones, en el autor de obras tan trascendentales como: "El pozo y el péndulo", "El Cuervo" o "Los crímenes de la calle Morgue".

Ese espíritu, también catapultado en el papel del ensayista crítico, motivó al cineasta argentino Richie Ercolalo, para encapsular audiovisualmente parte de su vida. Es decir, bajo la producción de "Sofía Films" se está pronto a estrenar "La Pluma Negra".
Dicha película, ambientada en el siglo XIX, retrata al Poe sumergido en los evasivos brazos del alcoholismo y la constante necesidad de publicar sus oscuros escritos.
Gianni Sabbione encarna al influyente narrador, mientras que Verónica Belloni interpreta a Virginia Clemm, joven sobrina de Poe quién se trasformaría en su esposa.

En la breve filmografía de Ercolalo, destaca el premiado cortometraje: "Y un día nos llevará", de 2002...
Habrá que esperar y encomendarse a la alma más piadosa, para que pronto los tormentos más terroríficos de Edgar Allan Poe, tiñan las butacas de algún cine nacional.

¿Que te Hicieron "Zona"?

Era una vieja costumbre del día viernes.
Cómo cualquier fin de semana que se apreciara de tal, las antiguas páginas del suplemento "Zona de Contacto" del diario "El Mercurio", servían de iniciático trampolín, a un mundo creativamente llamativo.
Aunque uno estuviese o no de acuerdo, las columnas en "primerísima persona singular" de Ernesto Ayala, conjugadas con el pequeño espacio dedicado al poético andar de Mauricio Rebolés. O los puntuales remezones que provocaban una avalancha de jóvenes apuestas literarias, que podían quedarse en la pirotécnica narrativa, pero que no escatimaban en escribir con instantánea ansiedad. Y eso sumado a la inolvidable saga de un adolescente que pasaba largas horas viendo videos de Ministry en "La vida según Benito", creada por el periodista Hernán Rodríguez Matte, dejaron la huella de quienes tienen algo valedero de entregar.
Visto desde otro ángulo, debieron de alzar la vara demasiada alta, en esta publicación nacida gracias a las últimas páginas del "Wiken".
Lamentablemente después de cosechar merecidos golpeteos de espalda, en especial post edición de dos libros compilatorios, "La Zona" pasó a aquel deleznable axioma del visitante que apesta al tercer día.
Con simplista contenido y mediocre trote editorial, este proyecto perdió tanta trascendencia que hace algunos años atrás peligro en continuar, derivando al alicaído batallón de hablar desde el forzado lugar común. Y por estos días, ha degenerado en un Web Site que sólo parece mirarse asimismo, dejando de lado a los verdaderamente protagonistas.
¿En que tiesto de las buenas intenciones quedaron almacenadas esas líneas, donde se divulgaba a algún autor o cineasta que subsistía silencioso?. ¿Porque, desde hace algunos años, parecen ser más importantes quien escribe la columna que su contenido?. ¿O es que acaso criticar e intentar "ironizar" con insistencia sobre los engendros televisivos de turno, se ha trasformado en el gran planteamiento de fondo?.
Quizás, aventurando la respuesta que hacen hincapié en los millones que delatan mi carnet, las preguntas deberían ir por otro lado...
¿Natural evolución de Target, cambio del segmento comunicacional o intereses opuesto dictaminados por los cibernéticos y actuales lectores?.
En una de esas si en los presentes días fuese un adolescente y leyera estas nostálgicas palabras, pensaría que simplemente: "La Zona" es otra. Que ya no es digerible para alguien de sobre 25 años y, por lo mismo, los códigos varían.
Será cuestión del tiempo más circunstancial.
Y de asimilar que Alberto Fuguet, el llamativo icono opinante de aquellos años, ya está dirigiendo una película generacional de los treinta.

(((Type O Negative: Eclécticos por Naturaleza)))

Oriundos de Brookyn, Type O Negative se transformó en una de las bandas más destellantes del circuito rockero norteamericano, a mediados de los noventas. Aunque muchos críticos clasificaron, en más de alguna oportunidad, su propuesta bajo el rótulo de "Doom Metal" es necesario aclarar que gracias a otros sabrosos ingredientes, sus estruendos sonoros
se matizan con heterogéneas vertientes. Desde variadas reminiscencia de la primaria etapa de Black Sabbath, hasta minuciosos conceptos narrativos extraídos a Joy Division. No dejando de lado, por supuesto, precisos guiños de un Hard Core más extremo.
Incluso es el propio Peter Steele (voz, bajo y líder de la agrupación) quien concluye: "Nuestra música tiene diferentes referentes. Es una fusión de Sicodelia, Metal clásico y bases muy Dark".

La primera producción discográfica de Type O Negative fue editada en 1991, bajo el nombre de "Slow, deep and hard". Con una sonoridad enérgica y jerarquizando la descarga de distorsionadas guitarras, es notoria la carencia de una identidad en la potente voz del corpulento Steele. En 1993, aparece en el mercado "Bloody kisses", que es sencillamente una placa demoledora de espíritus. De la mano de temas como "Black N 1", "Christian woman" o "Blood & fire", el álbum destaca por la sensibilidad y romanticismo, volcadas en letras que destellan crudeza emotiva hasta decir basta.
A finales de 1994, en momentos que el grupo es holgadamente alabado por la prensa, se lanza "Origin of the feces". Este título presenta el concierto en vivo, registrado en Brighton Beach, reuniendo canciones de su primer trabajo, trasformándolo en un bocado musical muy apetecible, en especial para los fieles seguidores.
"October rust" de 1996, fue el siguiente alarido del cuarteto estadounidense. Si bien el tono relajado y las melodías convencionales aún permanecen, se concretan dosis abrumadores de nihilismo social.Posteriormente, "Wold coming down", vio la luz.
En este trabajo, los ritmos lentos adornados de aquellos etéreos teclados de Josh Silver y sumada a la melancólica guitarra interpretada por Kenny Hickey, derivan en un tramado agridulce, que tanto gusta. Situación que se puede ratificar en "The least worst of", compilación en la cual vuelven a renacer viejos y reconocidos éxitos, en actualizadas versiones. Un compacto dirigido hacia un público masivo, que puede motivarse a descubrir más sobre esta banda neoyorquina.

Sin embargo, la máquina reactiva de nuevas creaciones siguió laborando a full...

"Life is killing me" fue el quinto engendró de vigoroso rock latiente, definido en las propias e irónicas declaraciones de Steele, a la manera de: "Un legado sonoro de errores pasados".
Así en espera del nuevo álbum que producirán, anunciado para el invierno del próximo año, la reflexión inesperada emerge porque sí...

¿Entre tanta desoladoras composiciones que acostumbraban a testificar los sinsabores vivenciales, mejores guardados, seguirá habiendo la pólvora disponible para el siguiente disparate que desenfundaran Steele y sus melenudos secuaces?.