lunes, octubre 31, 2005


Pampa Pa’ Que Te Quiero, Pampa Mal Criadora...

Parlante inusitado de la desolada pampa chilena, narrador de historias con brebajes adictivos, escritor hecho a puro ñeque nortino.
Hernán Rivera Letelier traspasa en muchos de sus pasajes literarios, el impulso recurrente de encapsular imaginativamente a quienes la vida, no les ha tratado tan bien.
La jarana insistente de seres que pretenden evadirse en el trago amigote, forma parte de la etapa más mágica y fecunda de este contemporáneo novelista nacional, que en estos días acaba de lanzar: "Romance del Duende que me Escribe Novelas".
Pero la afición, que pueder rayar en lo obsesivo, por emplear el correcto uso del contundente idioma español es característica de sus escritos. Porque tal cómo lo confiesa el propio creador de "La Reina Isabel cantaba rancheras", el enamoramiento hacia alguna palabra algo en desuso, lo convoca a una metodología íntima de recorrer hasta lo más inverosímil de nuestra lengua.


"Yo soy un amante de las palabras y antes de ponerlas las peso y las sopeso, de tal manera que calcen como un diamante. Por lo mismo, soy un coleccionista de diccionarios... Acabo de descubrir la palabra fárfara, hermosísima...", contextualiza el literato chileno.

Así haciendo caso omiso a quedarse empantanado en el lodo del narrador acomodado y desafiante a la críptica escena literaria, que en un principio tendió a rechazarlo, Rivera Letelier se derrama emotivamente en cada página. Asegurando que es acompañado de un duende irrisorio, el cual coloca énfasis en las cuestiones más simples de lo cotidiano, para luego "soplarle" en seguir concretando sus ansiados sueños.
Y en ese sentido asoma la figura del minero sudoroso, que contrasta frente a lo vertiginoso de las bulliciosas ciudades, pero que nos retrotrae a parte de nuestra historia más pura.


Quizás, diciendolo en otra forma o acomodándose en el tono adecuado, Rivera Letelier es el pampino errante que se sube a la micro de la contingencia aturdidora y lanza sus sutiles melodías, entonando fervorosamente: No nos olviden. Nosotros también somos parte de ustedes.

lunes, octubre 24, 2005

"Playing The Angel": La plumífera figura que renguea

Parece que fuese ayer cuando Dave Gahan deambulaba por unos desolados paisajes, cantando a los cuatro vientos que se debía de disfrutar el silencio. Tiempos donde lo sustancial era representado en la rosa roja sangrante, la cual suele estar alojada en los oscuros rincones de cualquier melómano compulsivo.
Porque es inevitable, no lanzar un vistazo por el retrovisor vivencial, preponderando las ganas insaciables de remontarse a aquella velada donde la excusa perfecta en el Velódromo del Nacional fue promocionar un álbum, plegado de devociones íntimas y masoquistas.
Pero de eso, ya ha pasado mucha agua bajo el puente...
Alan Wilder decidió, hace algunos años, marginarse.
Dave recuperado del precipicio emocional cargó energías, en algunas letras que dan el contraluz al oficialismo temático de Martin Gore. Y lo pusilánime de "Exciter", quizás la producción discográfica más discreta de Depeche Mode, es conjugada en cercano pretérito.
Ahora el nuevo aliento se titula "Playing the Angel", un disco compuesto por doce temas.
Un trabajo donde la descuidada presentación visual persevera en dicho ámbito, el continuismo de sus últimas dos producciones discográficas. ¿Porque desde hace un tiempo hasta ahora, Depeche Mode satura de fotografías tan triviales el interior de sus trabajos musicales?...
Despejando este gran "pequeño detalle", al comenzar las preliminares melodías de "A pain that i’mused to" se siente el indicio de la insistente búsqueda. Porque el fantasmita del toque sutil de las atmósferas introspectivas que se fueron con la post producción de Wilder, evidencia que el mesón cojea.
Y en varios tracks, incluyendo el primer simple "Precious", uno se queda con el sabor en la boca de escuchar maquetas, impregnadas sólo de buenas intenciones. Quizás los enunciados de los titulares sean persuasivos. Sin embargo al momento de detenerse, las sonoras crónicas irradian frialdad compositiva. Esto último, es muy palpable en el tema "Lilian".
Ni los momentos donde Gore asoma vocalmente, son decidores en colocar ese plus distintivo, exigible a estos cuarentones músicos de Basildon que marcaron pautas cuando, de electrónica inductiva se trataba.

miércoles, octubre 19, 2005

En el Extremo del Rock Medieval

Medievales trovadores, singulares acróbatas y persuasivos gaiteros. Así se plasman, algunas de las características del oscuro grupo alemán: In Extremo. Y gracias a ellas, se han convertido en una propuesta innovadora del viejo continente.
Einhorn, vocalista y líder de la banda, durante años transitó por diferentes proyectos, incluso compartiendo agrupaciones con algunos integrantes de Rammstein.
NR13, Einschlago Noah fueron parte de sus aventuras musicales que pasaron al olvido. Hasta que en 1996, nació el anhelado engendro artístico, bautizado con el nombre de In Extremo.
Junto a Flex Der Biegsame, Dr. Pyrmonte y Yellow Pfeiffer dieron luz a este concepto berlinés. Así, con el trascurso del tiempo y la incorporación de tres nuevos ejecutores, el conjunto maduró...
Gaitas, flautas, dulzainas y arpas se acostumbran a matizar con rockeras guitarras. A este sonido debemos agregarle la potencia de las descargas sónicas a mil, que son muy bien representadas por una llamativa puesta en escena, empleando malabares con fuego.
"Amamos de forma inusual nuestros instrumentos. Y los espectáculos en vivo, mezclamos el Rock con eventos medievales", argumenta Einhorn.
Sobre las temáticas tratadas, el propio músico afirma: "Ai vis lo Lop (Tema incluido en su primera producción discográfica titulada "Weckt Die Toten!") es un cantar provenzal francés del Siglo XIII. La historia habla de un pobre granjero que se compara a sí mismo con la liebre, el lobo y una comadreja. Ve que ellos no hacen nada, mientras él trabaja muy duro. Tras una borrachera, para olvidar su penosa vida, despierta y vuelve a darse cuenta de toda la miseria no es tal. "Two Sostra" (Track que cierra el antes mencionado álbum) es una canción interpretada en noruego antiguo, sobre dos princesas hermanas. Una hermosa, de buen corazón. En cambio la otra, malvada y celosa. La bella tenía un prometido, pero su propia sangre encarceló a su amor, lo cual es contado desde la perspectiva de un antiguo trovador".
Todo lo aparatoso, en cuanto a lo visual, además de la contundencia melódica de In Extremo es apreciable en el DVD: "Live 2002". Sin embargo, lo trascendente de su música es también rescatable en otro ámbito: "Esto es similar a lo que se tocaba en el siglo XV, donde se tenía la idea de divertir a la gente y mostrar cosas mágicas. Pero, a la vez, haciendo un trabajo bajo presión y miedo, porque si a la gente no le gustaba podían mandarlos a la horca... Ya estar grabando un disco o escribir canciones es mucho trabajo, porque estamos leyendo muchos libros de ese tiempo para sacar frases y textos de esta música divertida. Así podemos argumentar lo que estamos hablando. Producto de ello, trabajamos investigando muchísimo en las bibliotecas de Alemania", declara Einhorn.
Lamentablemente la discografía de In Extremo no está editada en Chile, pero el esfuerzo de rastrear cualquier paso de estos vanguardista trovadores del metal contagioso, bien vale la pena.

*¡A romper el chanchito se ha dicho!: Trent Reznor encabezando su cabrón proyecto de Nine Inch Nails se presentará en tierras chilenas, en el remozado Teatro Caupolicán, este 30 de noviembre. También los alemanes de Rammstein harán de las suyas, con sus poperas programaciones industriales, en fecha y lugar por confirmar.
Los que ya se aproximan a latitudes nacionales son Diary of Dreams, otros teutones que pululan en sus sicóticos alaridos Electro Dark. Estos mandingas, liderados por Adrian Hates, se subirán al escenario de Blondie Discotheque, el próximo 29 de Octubre, enfatizando su tocata en temas arrancados de su última placa llamada: "Nigredo".

viernes, octubre 14, 2005

"The Alphabet": Los Misteriosos Primeros Aullidos de David Lynch

Desde sus primeras pinceladas cinematográficas, la laberíntica construcción del relato más onírico y esquizofrénico ha caracterizado el espíritu creativo de David Lynch.

Esto porque al hablar sobre alguna de sus desconcertantes producciones, significa comprender que el lenguaje audiovisual es infinitamente más trascendente del que nos entrega, a menudo, el circuito hollywoodense.

Basta con remontarse a su experimental segundo cortometraje filmado en 1968, el cual costó 2.000 dólares, para aventurar los venideros juegos simbólicos que predominarían en la extensa filmografía del director de películas tan inclasificables como: "Eraserhead", "Blue Velvet" y "Lost Highway".

A raíz de aquello, no sorprende que en "The Alphabet" ya matice la secuencia animada sumadas a acciones reales, dando aquella descarriada visión al infantil proceso del aprendizaje.
Todo registrado en una cámara de 16 milímetros y gracias a los recursos que le entregó el mecenas Rodger La Pelle, otro artista plástico que visualizaba en Lynch al joven atormentado que concebía al máximo sus fantasmagóricas rarezas visuales.

¿El resultado? : Breves cuatro minutos, donde la distorsionada figura de una chica sufre sangrientas alucinaciones al pasar, siempre en torno a melodías interpretadas por pequeñas voces.
Pesadillas crudas y visuales o las primarías divagaciones que, a la larga, se concretarían en la surrealista forma de hacer, o mejor dicho, sentir el cine de intimidación.

sábado, octubre 08, 2005

El "Mágico Cojo del Trasnoche", ya Conoce al Fuguet Cinematográfico

Aquel futuro tan idealizado que tiende a proyectarse en los ansiosos borradores idílicos de los padres hacia sus hijos, siempre bien publicitado por las casas estudiantiles que incentivan las ganas locas de conseguir el exitoso título profesional. Ese cartón que intrínsecamente, ¿debería dictaminarlo?, dará la supuesta felicidad y estabilidad económica...

Ese maquiavélico jueguito tan estructurado, en una sociedad que reniega del aprendizaje absorbido en el fracaso, lanzando todo tipo de improperios a quienes, no han conseguido un "status social", al ya llevar parte del tranco recorrido...
En dicho planteamiento algo simple, pero a la vez muy contingente del sistema neobrutalista que nos atrapa, Alberto Fuguet se lanza al ruedo temático del cine. Quizás enfrentando las adversidades o ansias del virginal dire
ctor cinematográfico que se hace a pulso, se descartucha con muchos de los errores, que el mismo tanto comentó cuando transitaba en la acera opinante.
Pero más allá de cualquier apreciación técnica, existen otras lecturas secretadas en cualquier obra audiovisual y, en especial, de lo vivido por Gastón. Porque el sólo hecho de plantear el cine más íntimo en su película "Se Arrienda", exceptuando los efectista efectos especiales o la gratuidad en escenas sexuales, se agradecen...

¿Saben algo?.
Recuerdo que hace un par de años atrás, gracias al aliento de quién remite la columna hacía el personaje en cuestión, le envíe algunas líneas referente a su figura literaria, al propio Fuguet. Después de los pertinentes días que pasaron, el escritor de "Sobredosis" me respondió el mail.
En términos concretos, aparte de las respectivas consideraciones puntuales, él argumentaba que cuando se sentía motivando a otros, su tarea creativa era reconfortada, en algún plano.
Desde entonces y haciendo propia la expresión cotidiana de Fuguet en sus mails de entonces, acostumbro sin querer queriendo a despedirme cibernéticamente con el "salu2".
Sí, con el "salu2", patentado por él.
* www.nudociego.blogspot.com: Es el lugar en la red donde descarga sus verbales energías, Andrés Valdivia. Este músico nacional y actual director creativo de Radio Duna, compuso parte de la música que se escucha en "Se Arrienda". La otra cara creativa, en términos melódicos, la integró Cristian Heyne.
A propósito de los envolventes trances que genera Shogún, en
http://www.heyne.blogspot.com,/ pueden bajar algunos tracks inéditos del unipersonal proyecto de él.

martes, octubre 04, 2005

Las Románticas Andanzas de And Also The Trees

Mientras la radical escena gótica paría a sus hijos más bastardos, alzando la pálida figura del productivo Rozz Williams con los alienados compañeros de Christian Death y muchos todavía se negaban a aceptar el trágico partir de Ian Curtis, existían algunos que lanzaban una rigurosa segunda lectura musical al Pop intimista.

Fue así que el sonido de guitarras abrumadoras, sumadas a la oscuridad refinada en aquel período denominado Post Punk, personificó en
And Also The Trees las ganas de ir más allá.
Influenciados por el romanticismo de la época Prerrafaelista, estos ingleses colorearon sus imaginarias historias donde lo impensable podía acontecer, con hipnóticos sintetizados.
Además los atisbos de las sutiles referencias jazísticas, se proyectaron desde su primera producción discográfica de 1981, en donde ya queda claro que las letras escritas por
Simon Huw Jones, podían asimilarse al conversado vapor emanado del nostálgico café recién servido.
O que la sensación acogedora del despertar otoñal, luego de la lluvia golpeadora y noctámbula, es notablemente evidente en el clásico álbum:
"The Millpond Years".
Pero esto no significa el descartar por un caprichoso sí, las contundentes arremetidas en temas más ruidosos, como es lo acontecido en
“The Renegade”. Porque en fértiles terrenos del romanticismo acérrimo, And Also The Trees siempre tuvo algo que entregar.

Si
Gustavo Adolfo Bécquer hubiese sido músico y contemporáneos a ellos, es valedero imaginar que pudo haber sido partícipe en esta introspectiva agrupación.

*“From Horizon to Horizon” es el título de un interesante compilado compuesto por singles editados, entre 1983 y 1992, por And Also The Trees. A través de dicha placa, se puede dar el primer vistazo a este melódico proyecto inglés.

domingo, octubre 02, 2005

La Mano Se Venía Mal

Los paisajes atónicos siguen desfilando, colindando hacia ti, el natural catarsis del viaje inductivo.
Ya nada tiene porque encuadrarse en la lógica más sensata, ni menos dar formales explicaciones.
Es tarde, no deberías de estar allí, ya que la abúlica acción de la espectadora perdida, ya no te va. Sólo mójate la cara.
Una vez te lo dije. Lo aseguré, pero no era el momento.
El viaje sin retorno, solventado en el plano angular putrefacto que cuando niña tanto temías absolver, se apodera de la ciudad del mar. Los insistente reclamos de él, son parte de la escenografía peor lograda. Y cuando miras a tu alrededor, la cabeza se emborracha lapidariamente.
Es el costo alternativo a asomarse por la puerta del cinismo institucionalizado o los gritos abrumadores que provienen de un inconsciente culposo. Fueron las ganas malogradas de la mitomanía vomitiva que sirvieron para tu papel tapiz. Son mis imágenes que desfilan frente, sólo clavando la mirada e insinuando el resto recordatorio. Eran las formas de tomarte por la cintura y morder con levedad el labio inferior, que tanto deseabas. Es el colapso sinuoso del precipicio espiritual.
Es decir, debería decir, son divagaciones varias. Divagaciones tuyas, muy traumáticas que te abofetean con solidez.
Es la contradicción de aquella alma enfermiza que atenta consigo misma, lastimera furiosa o intratable...
Llámese cómo tú quieras. Lo siento. Lo siento, de verdad.
A veces, ser tan penetrantes en palabras denota que existe en nuestro interior un amigote que sacude cuerpos y que nos traiciona, hablando por nosotros.
Y mira la forma irónica del mío. Colmo de males...
Hay que irse a negro y regresar.
¿Pero, tú volviste?.
Nuevamente las escenas desenfocadas que te enredan. Collage de sensaciones...

Ya no soy el niño en demasía introspectivo, que se cobijaba con dependencia en el resto. Ya no estoy tan nublado en la búsqueda, menos en escucharme en el eco saturado. Saturar de ruido temperamental que ensordece los querubines.
Ayer brillaba el sol desde ese horizonte, lo que te permitió acomodar los muebles a tu antojo, dejándolos a la maliciosa convivencia.
Ante tu presente desaliento, mi más sentido pésame.
Dicen, se leía en los antiguos titulares de la prensa que escribía con mayúscula, que “quién a hierro mata, a hierro muere”.
Tanto que te vanagloriabas que en el área de las matemáticas jugabas de local y no entiendes que siempre dos más dos resulta cuatro. Es así y no lo dictamino yo. Ni más, ni menos. De rebote, colmo de sanidades.
Porque alguien que apuesta al bello sentir de las palabras, cree que el acto poético sirve de terapéutica remisión y camina sin paso fijo, por las calles de Independencia, apuesta sobre lo que él considera seguro.
Lo siento, se comprueba en el tono de tu voz. En esta mano, perdiste por inercia.