Recientemente y por ese espíritu mercantil del DVD, salió editado una versión sin cortes de “Dune”, del impredecible director norteamericano, David Lynch.
Esta aplaudida película, la cuál esta basada en el libro escrito por Frank Herbert a principios de los sesentas, relata las singulares vivencias futuristas de Paul Atreides.
Pese a que en términos personales esta cinta no captura obsesivamente mi atención como otras de Lynch, la escalofriante “The Elephant Man” o el laberíntico misterio de “Lost Highway” se han trasformado en noctámbulas adicciones, siempre es gratificante darle esa nueva mirada remasterizada.
Sin embargo, es necesario aclarar que el reconocido realizador norteamericano no fue el primero en interesarse por la saga galáctica novelada de Herbert.
Nuestro Alejandro Jodorowsky, impulsado por la eterna aura mística, trabajó con la productora “Camera One” en los primarios esfuerzos para llevarla a la pantalla grande.
Aprovechando que, ya por ese entonces, el creador de la psicomagia era alabado por sus dos primeras realizaciones cinematográficas; involucró en el proyecto al pintor surrealista Salvador Dalí.
Obviamente cuando el choque de egos es demasiado fuerte, por parte de dos creadores tan sublimes, las buenas intenciones tienden a diluirse. Antes de iniciar el proceso de rodaje, en el cual un derrochador Jodorowsky ya había gastado cerca de dos millones dólares, el proyecto se cayó.
Después de unos años, en donde el productor italiano Dino De Laurentis adquirió los derechos, Lynch reclutó a Kyle Maclachian en el papel protagónico. Felizmente y después de una serie de ediciones en DVD de irregular calidad, la distribuidora alemana “Laser Paradise” lanza este regalo para cualquier coleccionista del onírico mundo Lynchiano.
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