lunes, abril 11, 2005

Tan Lejos, Tan...


Gracias al momento donde el inconsciente personalísimo parece tomar el protagonismo inusitado o las dudas sobre hacia donde dirigirte crecen, los instantes mágicos del fluir han llegado.
Suena complejo y seductor. Dual e enfático.
El sólo acto de continuar enjaulados en un medio ambiente occidental que te incentiva lucrativamente, porque lo “productivo” que reclama el resto ya no importa tanto, derivan las sensibilidades de quedarte refugiado y pernoctar en esas sábanas imaginativas tan abrumadoras.
Te parecen mirarte a los ojos cuál cómplice, como cuando tu receptiva amante otoñal sube la mirada y te dice si te gustó. Así de cautivante. Quizás en forma radical, resulta pronunciarse para quienes enarbolamos la bandera pretenciosa de inmiscuirnos en el mundo del etéreo sentir.
Habrá que rebuscárselas, asimilando de forma conectiva a tu propia esencia, lo que te hace vibrar.
Mantenerlo silencioso, si tus cercanos no te sintonizan en el mismo dial.
E inclusive, ejercicio más que auto referente, reintegrarlo desde el polvoriento rinconcito claroscuro.
Porque si no logras efectuar el ineludible proceso interno del conocerte, enfrentando lo doloroso de exhumar los cadáveres del intenso dolor rojo sólido, la vida pasa y te envía burlescamente saludos hasta a tú madre.
Y el estado abúlico de encapsularse en la posición victimizante, donde las luces encantadoras del lagrimeo televisivo invitan maliciosamente a encontrar soluciones, se vuelve masoquista o recurrente.
Hace algunos días, entre tanto ajetreo cotidiano e innecesario de nombrar, una cercana vocecita femenina me comentaba sobre lo cercano que me sentía por medio de este blog. Ella, apelando al impulsivo discurso del aporte amigote, insistía que muchos de los planteamientos expuestos son demasiados íntimo. Y que, por lo mismo, se pierden al no ser decodificados con detendida rigurosidad.
En realidad, creo que no deja de tener algo de razón.
Tal vulnerable, con muchos de los referentes culturales que han sentado esta base circunstancial y esas ganas vigorosas de volcar expresiones emotivas, está latente en este medio sensato que me alienta.
Aquí, ahora. No sé si en términos muy metódicos, pero suelo pensar que me denuncian.
Que intentan decirles a ustedes, lectores ocasionales, que me vuelco a mostrarles un indicio. Aunque, parezca pretencioso hasta de escribirlo y poco interesante al razonar.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

me dejo pensativa lo que escribiste. sera porque siento que estoy en esa etapa que tu intentas señalar.
sigue adelante, ya que por lo menos tienes una fiel lectora.

un abrazo.
Marcela.

Anónimo dijo...

kkkkkk

Anónimo dijo...

si te quieres mostrar asi, cercano hacelo porque no muchas personas lo logran hacer. y todas tus recomendacioness estan bien buenas, tanto que seria buena idea volver a escuchar a jesus & mary chains (grupo que tenia buien abandonadoo). ojala sigas escribiendo cada dia mas y mejor.
te visitare a menudo. y no caigas en la tontera de escribir por escribir en tu blog.

Musa Floydiana dijo...

La responsabilidad de cada mente es tratar de poder al fin y al cabo transferir cada código o como se le quiera llamar. De esos indescriptibles, de los que te dejan en blanco o recobran risas precisas. Algunas personas a esa interioridad le llamamos Extraños Sentimientos, fácil de memorizar de llevarlo a cabo con los más cercanos. Que mejor que demostrarse internamente tal cual. ¿No nos llama la atención a las personas esa capacidad?, ¿todos la tenemos?, ¿es innata?, ¿es comprensiblemente para débiles o fuerte producto de sucesos marcadores en algunos? Es simple es parte de cada mente la conexión de esos Mases (de cantidad) fusionados. algunos fusionan o jerarquizan. Es allí donde yace todo lo hermoso, todo cuanto eres. Tradúzcanme piel, roces, sentido, razones Y verdades mientras para mí significa “mis códigos”. ¿Son defendibles? ¿Se pueden defender? Allí comienza mi histeria. Ahora lo que siempre no me ha quedado claro es si cada código privado mejor dicho personal es verdad o un conjunto de todos otros códigos.
Desde este lado se puede recibir desde allá donde era primordial dar ya no se caven duda que se cuestionan mas lo recibido mediante largo plazo. Hay personas que nos hacen preguntar porque darles si no dan, otras que a ojos cerrados me vale por completo, otros que ni para preguntas, y así sucesivamente. Que loco. Yo antes daba y no reclamaba, inconcientemente si reclamaba pero con esos códigos, si los poseías en el sentido particular similar a mi conexión que me hacia sentir especial, únicamente entupida ahora pensándolo es difícil. Inconcientemente lo sigo de igual manera, pero entupidamente conciente… que contradictorio. ¬¬
¿Como se pueden traspasar, transmitir aquellos códigos confusos y fusionados concientemente? ¿Hay que estar despiertos para saberlos? Quedémonos con los colores, las imágenes, los sonidos, los roces y todo eso…hoy me dijeron que algunas cosas de esas n o existen...Que el sonido no existe…me dejaron aislada en un mar de preguntas….
Pd: La palabra estupidez es como aprender nuevos conocimientos, entre más entupido llegues a ser mas conocimiento se podría alcanzar, mas te caes mas profundizas, posiblemente este en lo cierto. Es muy simplista lo dicho. Da igual.


Que estes bien J.S.T "DE Ese occidente hasta este otro."
Besos.