domingo, enero 28, 2007

Total en Ciernes

Ahora pienso en humedecer tus labios, ahora a estas alturas de la desvelada noche que me resulta fácil en confiar que el lacónico escenario íntimo entregue lo que somos, en lo que seremos.
Visualizo a corta distancia los poros impolutos y bastante abiertos ya para una niña silenciosa que se negó a ser pusilánime, pero que en la instancia adecuada felizmente dejó escapar.
Pido sigilosamente confianza, intercambio apenas un sentir, uno entre muchos, muchos de sentir.
Cambio el tono medular del susurro cómplice, tratando de perpetrar el andar laberíntico de tu piel.
¡Vaya tarea bien sensata!.
Sí, me cuadra.
Cuál manzana y limpia fruta de obsesiones punitivas, creo que debería de decírtelo claramente, de dejar las divagaciones confusas e insolutas. Total, escena de escoltes retraídos, hemos caído hondo por un torrente inclasificable, cuando me dejas ver las pecas sinuosas e inductivas.
Sólo abro los ojos, miro unas ramas añosas que hacen el silencio.
Saco cálculos inútiles.
Y sólo veo mis miradas circulares en ese espejo vivo que clama algo, que confundo sus tonos, pero me esmero en decodificar.
Me rasguñas, me duele y callo.
Pides que juguemos, sedes y entregas...
Tientas y vuelves a dar.
Caes en tus ojos grandilocuentes, vuelves a confundirte.
Una para ti, es sensiblera de razones justas.
Y pa’ variar: Lo críptico rodea tu entrepierna que no es fácil de atesorar.
Bajo esas líneas rojas que parpadea en tus labios, hay un mensaje implícito que quiero saber.
Mientras el viento corre la tela azulina de mí ya oscura ventana, me vengo a percatar que se me escapa otro día más. Qué la poetiza responde a su manera, qué la cortina aunque vuelva a su lugar de origen me avisará nuevamente.
Y otra vez.
Y una vez más, al metro cuadrado.

martes, enero 23, 2007

La Cine Instancia del Relajo

Desde hace tiempo que me viene dando vuelta la insensata idea de viajar y hospedarme en el desquiciante Hotel Overlook. Más aún cuando releo el corpulento libro recopilatorio de crónicas del trabajo periodístico de Alberto Fuguet en diversos medios, bautizado con el nombre de “Primera Parte”, en donde los desvaríos y asociaciones deliberadamente cinematográficas hacen patente una de sus principales obsesiones.
Si bien nunca me ha dejado creativamente desconcertado las pinceladas literarias ni la ficción que Fuguet profesa, debe ser que mi enraizada parquedad al uso del español choca con sus bien alimentadas vivencias en torno a aquella adoptiva California, sí me conmueve a la hora de narrar sus particulares visiones frente a la pantalla grande.
El tipo se vuela y eso se nota. Y se agradece.
En especial cuando dedica pródigas líneas a dicho crítico ambiente, poco cálido por dónde se le mire, que ronda el Hotel Overlook - lugar propicio para el paulatino enloquecimiento de Jack Torrance- en la antológica película “El Resplandor”. (The shining, 1980).
Clásico de clásico, perturbador proyectil poco ortodoxo de Stanley Kubrick para lo que entonces se asociaba al estructurado concepto del horror más explícito y gore.
Un lugar de tales alienantes y gélidas características, aunque siendo bien riguroso vale decir que el verdadero nombre de dicho hotel es Timberline Lodge, demuestra que una malograda mente puesta al servicio del entorno indicado puede degenerarse para indagar en terrenos psicológicamente impensados y terroríficos.
Claro que me gustaría visitar dichos parajes- dignas parada que alimentaría la embriagante trivia cinéfila de cualquiera- pero mi interés también va por otro carril. Ese que dictamina a pasear por cerca de las montañosas envolventes y confirmar cuál disímil es el contraste que se produce entre lo árido de una zona con respecto al verdor del otro extremo, cómo emulando los inconducentes comportamientos alienantes que va sufriendo el protagónico papel escalofriantemente interpretado por Jack Nicholson, que gira en torno de los brebajes racionales a lo radical y sombrío.
Entre lo esquizofrénico de eso que aturde, versus el vivas tapiz de una tranquilidad aparente, que no es tal.
Creo, corresponde ya hacerlo, el exigir mis prontas vacaciones. Seguro así me llevo y termino el libro de Fuguet.

martes, enero 16, 2007

Entre Nos

Fue hace dos años, entre los desvaríos propios de afrontar una circunstancia vivencial bastante adversa y traumática, que nació este humilde espacio virtual: “llámese Blog”; confúndase con el nombre más ilógico a denominar: “Auto+Referencia!”.
Así nació, a la manera de un relajante ejercicio catártico, para dejar algo palpable de mis escritos y- por añadidura- proyectar los muchos sin sabores y alegrías que me afectaban. De reflexionar y dejarme llevar.

Obviamente, también de interactuar con el espontáneo auditorio que se trasformó en numeroso y vehemente, hasta para dejar plasmado un comentario, una murmuración o bien la puntiaguda objeción respectiva.
En el comienzo esta morada cibernética se mantuvo, cómo mero registrador de delirantes ideas vagas -bastante crípticas, vale decir- que germinaban porque sí. Vaya a saber uno, las reales razones de tamaña ñoñez.
Después y buscando la evolutiva línea testimonial, fueron germinando aquella ineludible mención a literatos, músicos, directores cinematográficos y creadores, en toda la extensión que puede llegar a simbolizar, dicho hermoso concepto artístico.

Ellos, de alguna u otra forma, son parte de lo que soy, de lo que he sido y seré. Por eso, he querido compartirlos con ustedes. Desde mi transversal pupitre del ecléctico bloguers, entusiasta hasta el majadero cansancio.
Con mi sintonía y mis ganas de hacerles un guiño, de decir que un libro no te puede cambiar la vida, pero si te la ilumina. ¡Y mucho!.

Qué una melodía propicia es la instancia adecuada de la reflexión, bien entendida. Incluso para volcar eso que más atesoras, bajo siete llaves. Qué el cine tiene múltiples lecturas, por sobre las supuestamente bien compuestitas y heterogéneas, que le entregan muchos “críticos cinematográficos”. (Raza comunicacional felizmente en proceso regenerativo) ...

“Lo que das, te lo das. Lo que no das, te lo quitas”,
acostumbra a afirmar en forma taxativa, el multidisciplinario artista tocopillano Alejandro Jodorowsky.
Y yo, durante estos dos años, me he dado este gustito.
El nuestro.
¡Era que no!.

jueves, enero 11, 2007

Doña Juana

Me agradan las texturas musicales que emanan de la propuesta de Juana Molina.
No es nada nuevo, lo sé.
Pero, me agradan.
Y no sé, más bien el tedio veraniego me gana por ahora, para intentar con justificaciones racionales.
¿Me lo permiten?.


Total es Enero, el calor me atonta y esta cantante argentina me calma. Me da un aire rico, cómo esa brisa nocturna que te refresca la cara, después de soportar las altas temperaturas.
Ok.
Les dejo con sus rudimentarias sombras para el video del tema “No es tan cierto”, el cual abre el álbum titulado “3 cosas”, editado en el 2002.


martes, enero 09, 2007

Sub Pop y su video habemus

Desde que el sello estadounidense Sub Pop diera un trascendental respaldo al sonido de Seattle, a principios de los noventas, su nombre fue catapultado a reconfortantes cifras azules y el respecto del medio musical “indie”.
Claro que a estas alturas resulta bien añejo todo eso, cuando un porcentaje importante de esta etiqueta está en las manos de uno de los conglomerados más poderosos, en cuanto a medios se refiere. Pero, esa es otra historia. Porque lo que propone el compilatorio lanzado en formado de DVD, “Acquired Taste”, es reunir a parte de las propuestas más bulladas que actualmente recluta dicha casa discográfica.
Está The Shins, con la primera e improvisada versión audiovisual del afamado tema “New Slang”. Otros que se hacen presente son The Portal Service. Y para rematar el cartel de alabadas agrupaciones los regalones de siempre: el cuarteto Mudhoney que aún mantienen algo de ese halo de guitarras “políticamente correctas y, a la vez, disonantes”.
Veinticinco videos diversos- algunos teñidos de bastante humor- que muestran lo que ha sido, en estos últimos años, el ahora compuestito menú melódico de Sub Pop.

The Shins "New Slang"

Tema que abre la selección de Sub Pop

domingo, enero 07, 2007

Homenaje al poeta Enrique Lihn


-Hablar del poeta chileno Enrique Lihn, (1929-1988), es retrotraerse a las partes más desconocidas de lo que somos o hemos sido. Su voz lírica siempre fue agridulce, carraspeada en la ironía que teñía su actuar.
Recuerdo, felizmente, cuando tuve la oportunidad de escuchar varios poemas leídos por el. Y decir que la piel se me puso de gallina es poco. He aquí un homenaje audiovisual simple, en imágenes recolectadas al azar por Inés Pauilino y Carlos Flores. Vaya desde acá mis más sentidas felicitaciones.

jueves, enero 04, 2007

¿Nieve en Enero?


Lento, pero seguro

* “- ¿Para qué puede servirme el arte del funambulismo?
Soseki
posó una mano en el hombro del joven, como hiciera un mes atrás.
-¿Para qué? En realidad, el poeta, el autentico poeta, posee el arte del funambulismo. Escribir significa avanzar palabra tras palabras por un hilo de belleza, el hilo de un poema, de una obra, de una historia estampada en un papel de seda. Escribir significa avanzar paso a paso, página tras página, por el camino del libro. Lo más difícil no es elevarse del suelo y mantenerse en equilibrio, ayudado por el balancín de la pluma, sobre el hilo del lenguaje. Tampoco significa caminar hacia delante por una línea continua interrumpida por vértigos tan furtivos como la caída de una coma o el obstáculo de un punto. No, lo más difícil, para el poeta, es permanecer constantemente en ese hilo que es la escritura, vivir cada momento de su vida a la altura del sueño, no bajar nunca, siquiera un instante, de la cuerda de su imaginación. En realidad, lo más difícil es convertirse en un funámbulo de la palabra.”

*Este extracto pertenece a la primera novela del escritor francés Maxence Fermine titulada “Nieve” (Editorial Anagrama, Colección “Panorama de narrativas, 105 páginas), quién a consta de la aventura de un joven poeta japonés que pretende seguir evolucionando en el arte de los Haiku, quiere proyectar el onírico mensaje del proceso creativo.
Y por que no decirlo, de cómo entender parte de nuestra vida...
Se le recomienda.

lunes, enero 01, 2007

Las últimas hadas crepusculares del 2006

-Antes que se vaya completamente por el escusado melódico este ya fenecido año, vale la pena un relajo final de la mano musical de Joanna Newsom que con su álbum “Ys”, dejó peinado para atrás a cuanto obseso melómano en búsqueda de nueva sensaciones.
Ella, la damisela muy bien cobijada en los medios más “indie”, impulsó a la arpa cómo su mejor compañera en los escenarios.
También el clamor de las cuerdas clásicas y los largos temas, configuran una producción que nunca raya en lo pusilánime.
De cualquier otra falencia estilística se le puede acusar a Newsom, menos de caer en guiños complacientes.
Y pensar que ni siquiera tiene 25 años.